Sexo en la tercera edad ¿Bueno o Malo?

El sexo es una parte fundamental en la vida de un individuo, que le permite liberarse de tensiones, tomarlo como fuente de expresión, reproducción, una forma de mostrar amor o relacionarse socialmente. ¿Pero qué pasa con las personas que llegan a la tercera edad ? Normalmente se cree que los adultos mayores ya no tienen esa necesidad sexual, ya sea porque escuchamos de ellos mismos que no están para esos trotes o porque no comentan realmente lo que sienten y las necesidades que tienen.

Las generaciones jóvenes de cierta forma ven el sexo a partir de este tercer ciclo como tabú, por considerar que los octogenarios no les interesa este tema, sin embargo, no hay nada mas alejado de la realidad.  Los mayores de sesenta años todavía pueden tener ese deseo vivo y es que la libido no desaparece, si bien hay cosas que se deben manejar como su resistencia, estado físico y su entorno, se pueden adaptar al estado actual para seguir disfrutando de ese placer necesario.

Según varios expertos la sexualidad en esta etapa de la vida trae consigo algunos beneficios que no debemos dejar pasar por desapercibidos. Si en esta cuarentena vives con un abuelo o una abuela porque no darles un masturbador para su propio goce o tal vez pagarle una puta, puede ser un vibrador para ella o contratarle un gigoló. Sea una u otra los beneficios son bastos y como ya lo dijimos según muchos expertos lo recomiendan cien por cien. 

Algunos de los mayores beneficios del sexo en la tercera edad son;

Mejora el funcionamiento del cerebro:

Para los que piensan que tener relaciones en esta etapa de la vida es innecesario, debo mencionar que están en un gran error; entre 2016 y 2017 varios estudios realizados por universidades de Oxford y Conventry, en el Reino Unido, arrojaron resultados sorprendentes sobre el tema. En la investigación lograron observar grupos entre 50 y 89 años que tenían una sexualidad activa, una mejora en sus funciones cognitivas, tales como recordar palabras y secuencias de números, en contraste con los que no eran activos sexualmente.

Tener una actitud positiva:

El disfrutar de momentos eróticos sanos y vivos en la etapa de la vejez reducen el riesgo de padecer depresión, contribuyendo a ver la vida con una buena actitud; permitiéndoles sentirse cómodos con ellos mismos.  Durante las prácticas sexuales se liberan hormonas como la endorfina, oxitocina y serotonina; estás ayudan al organismo tener una salud, seguridad y plenitud.

Es una buena forma de actividad física:

Esta es una buena forma de hacer ejercicio, aportando beneficios al corazón en determinados casos como el de las mujeres, disminuyendo el peligro de padecer problemas cardiovasculares. Se debe tener cuidado con los hombres, pues el riesgo de tener este tipo de problemas es mayor, posiblemente algunos fármacos como el viagra tengan alguna influencia sobre esto, por lo que, es recomendable ver a un especialista si notan problemas al respecto.

Es aconsejable para una sana relación de pareja:

Tener actividad física con tu cónyuge es favorable, sobre todo si han compartido muchos años de convivencia, una de las razones principales de la estabilidad de una relación duradera es el sexo y con el paso del tiempo es primordial para crear un compañerismo con la otra persona. Hay que tener adaptación, es seguro que no se pueden hacer la mimas cosas que en la juventud, de esta manera lograr un cambio en el ritmo de las relaciones sexuales que además del coito pueden incluir, abrazos, caricias, besos, palabras románticas y de aliento.

Previene el cáncer de próstata:

En el caso de los hombres de tercera edad, esta es buena estrategia para disminuir el riesgo de esta enfermedad, de una manera excitante, placentera y práctica. En las personas de edad avanzada la reducción de este padecimiento por medio de las relaciones con su pareja puede ser hasta de un 22% en comparación con los más jóvenes donde solo es de un 19%, según estudios recientes.

Favorece el sueño:

Igual que cualquier actividad sexual, se liberan hormonas que favorecen la relajación, la ansiedad y el estrés; gracias a su alcance anestésico, puede mejorar considerablemente el sueño. Aunque en algunas personas el sexo puede tener el efecto contrario así que todo depende del individuo, lo que es innegable es el efecto de bienestar y relajación que produce siendo perfecto para los que viven grandes tensiones durante el día y quieren tener una agradable noche.

Pero a pesar de todos estos beneficios, muchos son los que mantienen cierto recelo o tabúes, incluso por parte de los mismos individuos de tercera generación, lo cuales ven con temor ser juzgados por los prejuicios sociales o mitos infundados que pretenden decidir que su ciclo sexual ya acabo. Traemos a acotación algunas de esas falsas afirmaciones como lo son:

Las personas mayores no sienten deseo sexual:

Como se puede notar por los beneficios anteriores, esta aseveración es totalmente infundada y afecta en su mayoría al género femenino, ya que, utilizan a modo de excusa la llegada de la menopausia; algo totalmente absurdo, puesto que en la tercera edad se ha demostrado que no hay un cambio en sus necesidades sin importar los años transcurridos.  El sexo es parte fundamental de la vida, al igual que envejecer y podemos disfrutar de este a plenitud ya seas mujer u hombre.

La gente mayor no necesita una pareja:

Totalmente equivocado, los adultos mayores necesitan de la compañía y el cuidado de alguien, sentirse querido o amado es saludable para ellos. Sus prioridades pueden cambiar, tal vez ya no sean tan Fogosos como antes y les interese más construir un vínculo emocional, pero esto no significa que la llama de la pasión haya dejado de arder; simplemente sus formas de querer han madurado enfocándose en el amar, compartir y cuidar.

Tener relaciones es peligroso:

Sobre este mito se puede decir que es todo lo contrario, cómo se mencionó con anterioridad tener una vida sexual activa equivale a ejercitarse, algo muy saludable para el cuerpo y la salud. No hay que confundirse, si existe un impedimento físico o enfermedad se deben extremar precauciones; del resto solo queda disfrutar.

Los ancianos no se masturban:

Otro estereotipo erróneo, ya que siguen siendo seres que sienten. Esta es una buena forma de autodescubrise, conocerse y disfrutar del placer sexual de una manera satisfactoria. Muchos ocultan esta rutina por temor al que dirán o a ser juzgado por la sociedad.

La sexualidad es un aspecto inherente en el ser humano, por lo tanto, no se le puede poner fecha de caducidad y mucho menos decidir que generación puede tenerla; así que saquen esas ideas erróneas de su cabeza, no importa la edad que se tenga.

Es momento para que las personas mayores vuelvan a vivir, sentir, disfrutar y enamorarse. Siempre es aconsejable visitar a un especialista para descartar cualquier tipo de inconveniente que dificulte el rendimiento sexual o problemas de salud.

Son muchos los beneficios para aquellos que están esa etapa de su vida, no es el final de un ciclo, sino el inicio de uno mejor, porque recuerden cuando se trata de placer, la edad es solo un número.

Recordemos que según el DANE para el 2018 habían 48 millones de habitantes en el territorio colombiano de los cuales el 9.1% eran personas mayores a 65 años, es decir de tercera edad no dejemos a un lado las necesidades fisiológicas sexuales de este segmento de personas. Seamos incluyentes en todos los tipos de personas.